#TantSIcomNO

Defiendo abiertamente el derecho de todos los catalanes a decidir el futuro de Cataluña, este próximo 1 de octubre.

Este referéndum es legítimo, es necesario y creo no hay otra alternativa.

En un estado español normal, hubiera pactado un referéndum y hubiera puesto toda su estrategia en ganar la opción unionista.

Una sociedad civil que ha defendido el derecho a decidir sin precedentes, movilizaciones que han sacado a la calle millones de personas, han hecho una cadena humana que ha cruzado el territorio, ha hecho una consulta la del 9N i una mayoría parlamentaria independentista.

Otros estados como Canadá o Gran Bretaña han pactado referéndums sin estos precedentes.

El estado español, podría haber evitado esta situación, si el gobierno central  hubiera reconocido la nacionalidad catalana o mejorado el financiamiento.

Hoy estamos en un momento complicado, muchos no sabemos que pasara. 

Algunos dirigentes nos dicen: Radicales, golpista, culpables de romper la convivencia y acusaciones muy lastimosas. Porque es cierto que hay diversidad, no todos son independentistas, hay quien quiere el inmovilismo y otros que quieren que España cambie.

Pero en la calles, convivimos en paz, como siempre, respetando a la gente de bien, nadie es bueno o malo por ser unionista o independentista.  

En las calles no hay esa tensión que los medios transmiten, no se lincha a la gente por poner una bandera española en el balcón.

Hoy los golpistas según los constitucionalistas, hemos salido a la calle como radicales, el gobierno de España se limita a decir que éramos menos que el año anterior.

Me preocupa mucho, que la política no tenga capacidad para llegar a la única solución que puede tener este conflicto, las urnas, con las garantías, con la campaña del NO i del SI.

Si los independentistas vivimos en paz en un estado que ni tan siquiera reconoce que Cataluña es una nación, quien se cree que no podemos vivir en una república Catalana que reconozca el derecho de ser español.

No se trata de quien tiene razón, se trata que votemos y que respetemos la voluntad de la mayoría.

Nadie es más que nadie, una persona un voto, es el sistema más justo.

Los unionistas quieren la derrota del independentismo, que no se engañe nadie, puede haber derrota, pero que nadie dude que no habrá rendición, solo la convicción de una revolución pacífica, libre y democrática.

Por eso,  hoy reconozco el coraje de los valientes que han llevado la revolución de las calles a las instituciones y el derecho a decidir, como el único camino que tenemos. No hay ley, no hay justicia que pueda callarnos.

Continuaremos saliendo a la calle, a pesar que la guardia civil registre medios de comunicación e imprentas, a pesar de las amenazas, habrá alcaldes que no dudaran poner-se al servició de un derecho humano como el derecho de los pueblos a decidir su autodeterminación.

Finalmente esto va de los que creemos en la democracia tanto si votas Si, como si votas No.